Sherlock Holmes

Con el encomiable eslogan de «Nada se les escapa» que podíamos ver en los carteles publicitarios de la película, se nos presenta la última versión llevada al cine del celebérrimo investigador privado inglés, al cual dio vida en sus novelas sir Arthur Conan Doyle: Sherlock Holmes y su inseparable amigo Watson.

Esta película, dirigida por Guy Ritchie, y cuyos actores principales son el polémico Robert Downey Jr., Jude Law, Rachel McAdams y Mark Strong, deja a un lado la idea preconcebida que teníamos del maduro y excéntrico caballero inglés de las novelas o, incluso, de sus anteriores adaptaciones. Se nos presenta a un renovado Holmes, en el que destaca una curiosa faceta cómica y violenta, ya que en toda la película entre toma y toma de investigación policiaca está pegándose con alguien o siendo objetivo de situaciones chistosas e hilarantes, por no mencionar su tortuosa relación con la señorita Irene Adler, muchísimo más profunda que la que se daba en los libros, debo añadir. Junto a este peculiar Sherlock, vemos a un también renovado Watson, que, en esta ocasión, en vez de elogiar las hazañas de un brillante investigador, critica continuamente los métodos de un alocado geniecillo, a la vez que observamos la palpable irritación del médico frente a todas las objecciones que expone su amigo para que no pueda proseguir con su vida privada.

Frente a todo esto, cabe destacar la bellísima banda sonora (en la que destacan ciertos acordes de violín, un detalle muy sutil si consideramos el hecho de que una de las aficiones de Holmes era tocar dicho instrumento.), junto con una lograda fotografía añeja y oscura.

Pese a todo, es una película entretenida, pero, desde luego, no apta para puristas de las novelas.

Mi nota: 5,5/10